Sabios Consejos
Educar a un niño no es hacerle aprender algo que no sabía, sino hacer de él alguien que no existía.
Vengándose, uno se iguala a su enemigo; perdonándolo, se muestra superior a él.
El ánimo gozoso hace florida la vida; el espíritu triste, marchita los sucesos.
Si los ciudadanos practicasen entre sí la amistad, no tendrían necesidad de la justicia.
Lo imposible es el fantasma de los tímidos y el refugio de los cobardes.
Los ojos no sirven de nada a un cerebro ciego.
(Proverbio árabe)
El más terrible de los sentimientos es el sentimiento de tener la esperanza perdida.
El genio es un uno por ciento de inspiración y un noventa y nueve por ciento de sudor.
Si haces bien para que te lo agradezcan, mercader eres, no bienhechor; codicioso, no caritativo.
Para que triunfe el mal, sólo es necesario que los buenos no hagan nada
A menudo me he tenido que comer mis palabras y he descubierto que era una dieta equilibrada
Nada tan estúpido como vencer; la verdadera gloria está en convencer.
Despacito y buena letra, que el hacer las cosas bien, importa más que el hacerlas.
El hombre que no ha amado apasionadamente ignora la mitad más hermosa de su vida.
Germán